Hola queridos simios he hecho una escala en mi viaje por el continuo espacio-tiempo en la ciudadela estelar de Concepcionotrón y, por el Mono Primigenio que me he encontrado con desagradables sorpresas.
Por ejemplo fui al Alma Mater de la cultura, el centro del conocimiento de la ciudadela a investigar posibles causas de mi exilio espacial, y con que me encuentro: con mercaderes, mercaderes en el templo del saber, usureros de la cultura, mezquinos satrapas (no se como se escribe o zatrapas) que me han dicho que si no poseo un carnet interestelar de ex/alumno, no puedo ingresar a su base de datos.
Esto es una afrenta al sentido de la academia, me están cobrando 6 UF (su moneda local) por un pase a la matríz de datos central, es inaudito.
Y aquí estoy en una ciberbiblioteca pública que si concuerda con la ética hacker de compartir el conocimiento y la información.
Pueden ustedes creerlo, en pleno siglo XXI de la era de Acuario algunos burócratas anquilosados se han apropiado de la llama primigenia del saber que con tanto dolor nos legó Prometeo y que nos abrió al mundo de la ciencia.
Pero no todo es tan malo, he contactado al protosimio Juan Barrenechea, aun humano el pobre, y me ha concedido un poco de acceso a la cultura a través del siempre recomendable grupo Exsimio, grupo que pretende acceder el conocimiento simiesco a través de su extraña y hermosa música progersiva, ya recordará el monomo el tema Cigoto de su autoría.
Para terminar un dato acerca del título del post, Hojas Muertas es un precioso tema del cual tengo algunas versiones del fantástico humano Miles Davis, pero también son hojas muertas las que se amarillan en las bases de datos centrales de la Casa Superior de Estudios de esta ciudadela, y a las que ni siquera el viento, exepto que sea ex/alumno o disponga de 6 UF anuales, tiene derecho de acariciar.
He dicho. tan tan
